Durante los numerosos envíos generados desde Barrios Porteños Web, nuestros lectores saben, conocen, la dedicación informativa que brindamos a los diferentes temas propuestos de acuerdo a la actualidad que nos toca vivir. Uno de esos temas, durante este año en particular, estuvo orientado a las inundaciones en la provincia de Buenos Aires.
Por nuestra Web pasaron los diferentes las opiniones y reflexiones de los protagonistas. Las luces y las sombras de una problemática que aún no tiene solución. Nos referíamos por aquellos días de agosto de este año, al drama de los inundados, de la una historia repetida y asfixiante. Pero sobre todo, lo que más duele es saber que se podría haber evitado…Llevando adelante las obras de infraestructura necesarias, para las cuales, fueron asignadas partidas presupuestarias.
Las consecuencias parecieran no tener fin. El caudal del río Salado aumentó considerablemente durante agosto, de 2.80 a 7.32 metros con desborde de cauce. Por estas horas, el agua se mantiene en 3.70 metros. De acuerdo a esta situación, la Operadora de Nuevos Ferrocarriles Argentinos señaló la imposibilidad de completar las obras del puente sobre dicho río que pretende unir la Ciudad de Buenos Aires con la de Mar del Plata.
Para concluir las obras, y de acuerdo a las recomendaciones de la Dirección de Hidraulica de la Provincia de Buenos Aires, resulta indispensable que el nivel de agua se ubique en los 2.80 metros.
La reanudación del servicio de trenes a la Feliz, depende de la finalización de las tareas que se encuentran realizadas en un 65 por ciento. Cabe recordar que el puente fue dañado durante la última crecida.
Es de esperar que las condiciones climáticas mejoren, como para que a la brevedad podamos contar con el servicio.
