Los días de mucha exposición solar pueden producirnos fuertes quemaduras con posterior descamación en la piel. En esta nota, algunos detalles para cuidar tu piel.
Una piel deshidrata corre el riesgo de escamarse con la exposición prolongada al sol. Lo ideal sería nutrirla durante todo el año para que en el verano podamos lucir un bronceado saludable y duradero sin consecuencias mayores.
Uno de los mejores consejos es que tomes muchísima agua. Esto ayudará a tu organismo a hidratar la superficie de la piel.
Si bien es cierto que un bronceado parejo puede hacernos lucir más sensuales también debemos saber que el sol no siempre es favorable para nuestra piel. Generalmente la hace envejecer más rápido y dependiendo del grado de pigmentación propia de la piel que tengamos pueden aparecer manchas o melasmas difíciles de erradicar.
En el caso que se te haya la mano con el sol, te presentamos una receta súper casera para que alivies el dolor en cuestiones de minutos.
Utiliza un bol y coloca en el palta pisada, jugo de naranja aceite de rosa mosqueta, que puedes conseguirlo en cualquier farmacia y un poquito de aceite de manzanilla. Mezcla todos estos elementos con un abanaba pisada y un poco de miel de abejas.
Utiliza este preparado cada vez que la piel te arda. Podrás sentir como te refresca y quita el color rojizo de quemado en cuestión de minutos.
Los ingredientes utilizados relajan los tejidos dañados de la piel y le otorgan hidratación.
Pueden ser utilizados también para evitar cicatrices y prevenir arrugas.
Intenta no utilizar productor químicos dado que pueden agravar la situación de la piel irritada. También deberás evitar bañarte con agua caliente dado que puede acelerar la descamación.
Busca un bronceado parejo de días. No intentes lograr el color de Jennifer López en un solo día. Recuerda que esto podría dañar tu piel y lograrás el efecto contrario.
Utiliza buenos bronceadores particularmente aquellos que te brindan algún tipo de protección y tienen entre sus componentes aceites esenciales que además de broncearte hidratan tu piel.
Pasado los 40 años lo aconsejable es que no expongas la piel de tu rostro al sol. Contrariamente deberás utilizar algún bloqueador solar. Esto se debe a que la piel del rostro es mucho más sensible que en el resto del cuerpo.
Para situaciones de ardor extremas, donde el paso siguientes o quizás la mejor solución es la descamación debes colocarte rodajas heladas de tomate en las zonas afectadas. Esto te brindará alivio rápido y acelerara la descamación para renovar la piel lastimada por el sol.
