Este es otro de los temas que necesitan del diálogo. Entre familiares, amigos, especialistas, educadores, personal sanitario. Numerosos casos de esta realidad se producen por la falta de una adecuada información y por los tiempos, marcados por la evolución y crecimiento psíquico/físico de cada ser humano. Por supuesto que también existen otras causas, como la violación, acoso, etc…
América Latina y el Caribe es la segunda región mundial con la mayor cantidad de nacimientos de madres adolescentes.
En nuestro país, se estima que uno de cada seis nacimientos, corresponde a una mamá adolescente. Que el 65,5 de esas jóvenes quedaron embarazadas por no utilizar un método preventivo. En tanto, el 53 por ciento de ellas, admitieron que no estaban buscando ser madres.
Otro dato para tener en cuenta, es que seis de cada diez embarazadas juveniles dejan de cursar en la escuela. Luego de varios años, son muy pocas las que retoman los estudios.
De acuerdo con un amplio estudio realizado por la Delegación Argentina del Fondo de Población de las Naciones Unidas, cuatro de cada diez madres adolescentes quedaron embarazadas en su primera vez.
El riesgo que provoca es grande y se ve reflejado en la salud a través de prácticas insalubres, consumo de medicamentos, al abandono escolar y a las escasas oportunidades laborales.
Nuestros jóvenes tienen derecho a ser debidamente informados, a las consultas médicas, a la orientación adecuada en cuanto al modo de cuidarse, etc…
¿Los objetivos? que el embarazo sea deseado, los partos controlados, apuntando siempre al desarrollo y plenitud de la juventud.
En tal sentido, con el apoyo de UNICEF y la Fundación para Estudio e Investigación de la Mujer, se llevará a cabo entre el 21 y 26 de setiembre, la semana para la Prevención del Embarazo no Planificado en la Adolescencia.
La convocatoria tendra lugar en avenida Mayo 930, a partir de las 12.
