Uno de los tours turísticos más exitosos de la Ciudad del Buenos Aires tiene que ver con la vida del Papa Francisco en su barrio natal .El reconocimiento del sumo pontífice que alguna vez fue un simple párroco de la Iglesia de Flores.
El tour porteño por la vida del papa Francisco sigue provocando atracción.
Jorge Bergoglio, el Papa argentino que paso de ser un simple obispo de Ciudad a ser el sumo pontífice de la Iglesia Católica sigue liderando la lista de curiosidades turísticas en la Ciudad de Buenos Aires.
Uno de los puntos más llamativos es la Basílica de San José de Flores donde Bergoglio comenzó a dar sus primeros pasos en la fe.
El Gobierno de la Ciudad organiza un tour por los puntos de la Ciudad más interesantes y concernientes a la vida del sumo pontífice.
El primer semestre del año un total de 2000 personas participaron del mismo.
La vida de Francisco se muestra en un recorrido de anécdotas. Cuenta la historia que Jorge
Bergoglio oficiaría la misa del 19 de marzo de 2013 por el día de San José, patrono de esa
Iglesia. Ya estaba todo organizado, pero la sorpresa en la elección de Francisco cambiaría
los planes. Con ese detalle, el guía Daniel Vega comienza el viaje por la vida del actual
Papa.
El recorrido incluye el lugar donde paso parte de su niñez Francisco, en Membrillar
531, para luego dirigirse a la Plazoleta Herminia Brumana, lugar que aun conserva los ecos
de la sonrisa ruidosa del Papa en sus primeros años.
Al llegar al Instituto de Nuestra Señora de la Misericordia se escucha la anécdota de cómo
Jorge Bergoglio aprendió a contar: subiendo esos nueve escalones en la puerta de la Iglesia.
El recorrido incluye historia, emoción y también anécdotas de la vida del hombre más popular del mundo.
El recorrido incluye la Escuela Hipólito Irigoyen donde Bergoglio se grado como técnico químico y la Cárcel de Devoto donde mayormente evangelizaba el sumo pontífice.
“No quería tener privilegios para entrar primero; hacía la fila con todos los familiares que iban a visitar a un ser querido que estaba preso y en la misma fila charlaba con ellos para conocerlos”, describen los allegados de aquellos días a Jorge.
En la mitad del recorrido el colectivo se detiene en la Parroquia San José del Talar, donde está el Santuario de la Virgen Desatanudos, de la cual el Papa se convirtió en devoto al conocerla en un viaje que realizó a Alemania. Años más tarde, le encargó a su amiga Ana que pintara tres imágenes de la Virgen.
El recorrido comienza en la Basílica San José y se organiza los sábados, domingos y feriados de 9 a 15 y tiene una duración de 3 horas.