El notable bar La Paz, ubicado en la esquina de la Av. Corrientes y Montevideo, del barrio de San Nicolás, lugar preferido de los intelectuales y bohemios porteños, no pudo resistir la crisis económica causada por la pandemia del coronavirus y decretaron su cierre definitivo. Fundado en 1944, comienza a tener brillo propio a partir de la década del 60, cuando la bohemia porteña eligió a este bar de San Nicolás para confrontar ideas. Hasta 1976 tuvo su sello distintivo, sus largas noches de encuentros y discusiones. En “La Paz” se reunían jóvenes literatos, cineastas, músicos, y principiantes psicoanalistas. Era el típico café de la Ciudad de Buenos Aires, con sus ventanas tipo guillotina, que se abren para arriba, siempre abiertas, ya que en esos tiempos el aire acondicionado todavía no existía. En sus mesas se podía ver a Rodolfo Walsh, Ricardo Piglia, el “Mono” Villegas o David Viñas. Luego vino la dictadura militar de 1976, y muchos de aquellos habitúes que ocuparon sus mesas hoy están desaparecidos, y otros debieron exiliarse. En la década del 90 estuvo a punto de cerrar, siendo rescatado en 1997 por el Gobierno de la Ciudad, y fue nombrado por la Legislatura porteña como uno de los bares notables de la Capital Federal. Su reapertura fue con un perfil más de pizza-bar, y open Kiosco las 24 horas en el frente. En su primer piso, donde estaban las míticas mesas de billar, se instaló en el 2016, el bar cooperativo “La Paz Arriba”, cuyo ingreso por escalera sobre la calle Montevideo 421, ofrece un amplio menú gastronómico, cerveza artesanal, propuestas culturales y musicales, feria de libros y juegos de mesa. El pasado 08 de Agosto, comunicaron en sus redes sociales que iban a permanecer cerrado por unas semanas. Pero su planta baja, no volvió a abrir desde el comienzo de la cuarentena, ni para delivery, take aways y tampoco uso sus veredas para colocar mesas. Por otra parte, hubo parte del personal que fue desvinculado y el paquete accionario sufrió variaciones. Hace aproximadamente quince días comenzaron a bajar el cartel de “La Paz” que estaba en la esquina de Corrientes y Montevideo. Sus ex dueños anunciaron el cierre del bar y su venta a los nuevos propietarios del local, que aseguraron su reconversión en un Restaurante de Sushi.
De “La Paz” sólo quedaron dos placas en su puerta, la que conmemora “La Institución del Día del Tango” y otra del sindicato de los canillitas que la rebautiza como “Esquina Alberto Castillo, Calle de Tango”.
